La RABLAB hace hincapié en la importancia de utilizar vacunas antirrábicas aprobadas y de alta calidad que cumplan las normas internacionales en términos de eficacia, seguridad y esterilidad.
Las vacunas antirrábicas por vía parenteral parenteral deberán cumplir con la potencia recomendada de al menos 1 UI/dosis a efecto de garantizar su actividad biológica protectora. Ante los diversos factores que pueden afectar la calidad de las vacunas (incluso de las aprobadas), RABLAB insta a las autoridades reguladoras a que asuman sus responsabilidades y comprueben regularmente la potencia de las vacunas como un indicador importante de la conformidad y estabilidad de la producción de lotes antes de su registro y lanzamiento al mercado.