La continua propagación de la peste porcina africana (PPA) es motivo de preocupación para el sector porcino a escala mundial, ya que no hay región que no se vea afectada. Durante muchos años, la falta de una vacuna o de un tratamiento eficaz ha hecho muy difícil el control de la enfermedad. La comunidad investigadora ha estado trabajando en el desarrollo de una vacuna eficaz y los recientes anuncios de vacunas vivas modificadas que están siendo aprobadas o probadas en algunos países han aumentado las esperanzas de disponer de nuevas herramientas eficaces para contener la actual epidemia de PPA. Muchos países están interesados en utilizar estas vacunas candidatas en sus esfuerzos por controlar los brotes en curso en su territorio.