Prólogo – «Micromundo, macrodatos»

Para adoptar buenas decisiones en materia de lucha contra las enfermedades hay que disponer de información factual de calidad. Pocos ejemplos mejores que la epidemia de influenza aviar ahora en curso o la pandemia causada por el coronavirus del síndrome respiratorio agudo severo de tipo 2, más conocido como SARS-CoV-2, para poner de relieve la necesidad de contar con datos de calidad, análisis sólidos, interpretaciones esclarecedoras y proyecciones rigurosas a la hora de gobernar todos los aspectos de la respuesta, no en vano la vigilancia sobre el terreno, la secuenciación de genomas completos y la elaboración de modelos espaciales y temporales sentaron las bases de todas las medidas adoptadas a partir de ahí, desde la restricción de desplazamientos o las medidas de «cortafuegos» hasta el seguimiento posterior a las intervenciones, pasando por la creación y la administración de vacunas. Sin ninguna duda, el éxito de la respuesta guarda estrecha relación con la calidad de los datos en que reposan las decisiones tanto estratégicas como operativas.