París, 26 de mayo de 2021 – El consumo de los productos del mar alcanza niveles nunca antes imaginados. Los animales acuáticos representan hoy la principal fuente de proteínas para miles de millones de personas en todo el planeta y se espera que la demanda aumente a medida que la población mundial se acerca a los 10 mil millones de habitantes. Sin embargo, las enfermedades animales siguen amenazando el crecimiento sostenible del sector de la acuicultura y, en consecuencia, nuestro suministro de alimentos.
Dado que es probable que sigan apareciendo nuevas enfermedades debido a factores como el cambio climático, las prácticas de cría insostenibles o el comercio no regulado, es de crucial importancia que exista una gestión cuidadosa de la sanidad de los animales acuáticos. La mayoría de estas enfermedades afectan gravemente no solo los sectores de la pesca y la acuicultura, sino también los ecosistemas abiertos en los que suelen vivir estas poblaciones. Por ejemplo, la propagación de una enfermedad de los anfibios conocida como quitridiomicosis ha afectado la biodiversidad mundial, mucho más que cualquier otra enfermedad registrada, desencadenando una crisis de extinción de anfibios.
Las consecuencias no terminan aquí, puesto que, a escala mundial, los brotes de enfermedades animales representan para la industria acuícola pérdidas de más de 6 mil millones de dólares al año. Además, amenazan la fuente de trabajo y los ingresos de casi 60 millones de personas empleadas por el sector de la producción de animales acuáticos.
Con el respaldo de su red internacional de expertos, la Organización Mundial de Sanidad Animal está al frente de la preservación de la importante contribución que representan los animales acuáticos. Con esto, la 88.ª Sesión General de la OIE marca el lanzamiento de la primera estrategia mundial sobre la sanidad de los animales acuáticos: se trata de un ambicioso llamado a la acción dirigido a mejorar la sostenibilidad de los sistemas de sanidad de los animales acuáticos.
En los próximos cinco años, la OIE reunirá a diferentes actores de la comunidad internacional, tales como Miembros de la OIE, expertos, socios, responsables políticos y el sector privado, con el fin de coordinar acciones conjuntas en respuesta a los desafíos del sector acuático. Bajo la guía de su nueva estrategia, la OIE continuará desarrollando normas, reforzando capacidades, coordinando la prevención, detección y respuesta a las enfermedades y, por último, proporcionando liderazgo.
Trabajando de forma mancomunada, podemos hacer realidad nuestra visión de una mejor sanidad y bienestar para los animales acuáticos en todo el mundo. Hagamos que la estrategia de la OIE para la sanidad de los animales acuáticos sea un pilar fundamental para lograr ecosistemas acuáticos más sostenibles.
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